Por: Michael Quiñones
Hay dirigentes que creen que Tumaco es una finca de su propiedad y pueden hacer lo que se les viene en gana!
Primera equivocación, Tumaco se prepara para darle una bofetada a los corruptos, bandidos, disfrazados de ovejas pero en realidad son peor que el mismo COVID.
La corrupción no permite que haya desarrollo, progreso, que no haya paz ni tranquilidad. La corrupción le quita oportunidades a los niños, adolescentes y jóvenes, en general a toda la ciudadanía; la corrupción es un cáncer el cual debemos extirpar, arrancar desde sus raíces para que nuestros pueblos vuelvan a florecer.
Como es posible que no exista una política pública enfocada hacia la juventud en CULTURA, DEPORTE, en medio de tantas artes, costumbres y saberes.
Cuando le quitamos las oportunidades de construir sueños a los niños que son el futuro del mundo, estamos creando una sociedad con desigualdad social, inequidad e injusticia social. No retrocedamos paisanos, amenos a nuestros hijos y amemos a nuestra tierra, a nuestro bello TUMACO.