La región del Catatumbo, en Norte de Santander, vive una de las crisis más graves de los últimos años, producto de los enfrentamientos entre el Ejército de Liberación Nacional (Eln) y las disidencias de las Farc. Según el gobernador William Villamizar, este conflicto ha dejado más de 80 muertos, 20 heridos y miles de personas desplazadas, exacerbando la incertidumbre y el temor entre la población civil.
El ministro de Defensa, Iván Velásquez, confirmó en rueda de prensa que el ELN ha trasladado combatientes desde Arauca hacia el Catatumbo, intensificando las acciones violentas en la zona. “Han participado en esta expedición sanguinaria que ha desatado el ELN en esta región”, señaló el ministro. Por su parte, el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, calificó los hechos como crímenes de guerra y criticó duramente la ruptura unilateral de los diálogos por parte del ELN.
A nivel político, figuras como Rodrigo Londoño, ‘Timochenko’, han pedido la intervención inmediata del Gobierno Nacional para proteger a la población civil, especialmente a líderes sociales y firmantes de paz, quienes han sido blanco de agresiones. En redes sociales, Londoño hizo un llamado urgente al presidente Gustavo Petro y a organismos internacionales como la Misión de la ONU en Colombia para garantizar la seguridad en el territorio.
La guerra entre guerrillas ha obligado a miles de campesinos a abandonar sus hogares, desplazándose hacia Cúcuta, Ocaña y Tibú, o incluso cruzando la frontera hacia Venezuela. La Defensoría del Pueblo informó que siete firmantes de paz y líderes sociales han sido asesinados en los últimos días.
Continúa el envío de tropas del Ejército hacia la zona del Catatumbo donde hace 3 días la guerrilla del ELN decidió declararle la guerra a las Disidencias de las Farc. Estos enfrentamientos ya dejan 80 personas muertas, 20 heridas, 20 secuestradas y más de 5.000 desplazadas.