En una operación de impacto contra el narcotráfico, la Policía Nacional logró desmantelar un laboratorio clandestino destinado al procesamiento de clorhidrato de cocaína, situado en una estructura subterránea en la zona rural del municipio de El Peñol. Este exitoso operativo es parte de la operación ATLAS y contó con la participación de la Seccional de Investigación Criminal, Inteligencia Policial, los comandos JUNGLA y la coordinación de la Fiscalía General de la Nación.
El laboratorio, capaz de producir hasta 2.000 kilos de clorhidrato de cocaína al mes, generaba ingresos estimados en 5.000 millones de pesos mensuales para las organizaciones criminales. Durante el operativo, los agentes encontraron y destruyeron una considerable cantidad de materiales utilizados en la producción de narcóticos:
- 150 kilogramos de base de coca
- 2.000 galones de gasolina
- 1.300 galones de acetona
- 300 kilos de soda cáustica
- 200 galones de ácido
- 15 hornos microondas
- 2 marcianos
- 1 prensa hidráulica
- 1 compresor
- 4 bultos de cinta de enmascarar
- 5 templadoras eléctricas
- 1 zona de secado
- 100 kilos de cal
- 8 grameras
- 4 cilindros de gas
- 20 cambuches con capacidad para 20 personas
- 20 canecas de 1.000 litros vacías
- 7 tubos de ensayo
- 15 rollos de papel celofán
El coronel Darío Daniel Montenegro Ojeda, comandante del Departamento de Policía Nariño, destacó la importancia del operativo: "El laboratorio clandestino fue ubicado en una estructura subterránea en la zona rural del municipio de El Peñol, Nariño. Este tenía una capacidad para producir hasta 2.000 kilos de clorhidrato de cocaína mensualmente”.
Todos los materiales incautados fueron destruidos en el lugar con el apoyo de técnicos antiexplosivos de los comandos JUNGLA, asegurando que no puedan ser reutilizados por las organizaciones criminales.